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Mauro Nicolás Gamboa
Un reloj en la pantalla central con la cuenta atrás, cuando faltaban cinco minutos para la hora anunciada del inicio del show, desataba la euforia en el público que abarrotaba el Movistar Arena de Madrid. Había muchísima expectación por ver la conclusión del exitoso tour europeo de Maluma bautizado +Prettty +Dirty y su tercera actuación en la capital.
Una enorme cortina transparente sobre la que se proyectaba frases icónicas de sus canciones iba calentando el ambiente y haciendo que el respetable encendiera motores y a continuación, un poderoso estallido de un petardo avisaba del inicio. Imágenes del artista colombiano se intercalaban con fotos de sus conciertos por todo el orbe. +Prettty +Dirty se leía en letras gigantes en tonos dorados sobre la pantalla oscura y la Intro comenzaba a sonar. El público ruge, grita y aplaude. La emoción es palpable. Ingresan los músicos y comienzan a tocar y pasados unos minutos, se muestra por la colosal pantalla principal, las entrañas del recinto y al artista camino al stage. Humo abundante, segundo petardo de la noche y emerge desde el subsuelo subido a una plataforma con un enorme abrigo, y comienza el show con “Borro cassette” acompañado por un cuerpo de bailarinas. El resultado de la ecuación es evidente: éxtasis y fiesta se entrelazan en los corazones de los miles de fanáticos de Maluma.
Maluma se muestra en permanente estado de conexión emocional con sus fans y estos no cesan ni un instante en acompañar el músico
“Buenas noches Madrid” dice el artista y el escenario que tiene tres alturas y dispone de luces adicionales es el centro de atención. Fuego, tiras de papel, trabajadas visuales y humo por doquier junto a la entrega absoluta del cantante y el apoyo de sus fans, ayudan a que el show sea completamente inmersivo. Un evento de muy alto nivel que por tercera noche hacía latir a la ciudad.
Va interpretando el artista del país cafetero canciones del calibre de “Obsesión”, “Carnaval”, y “Marinero” entre otras. Hace una reverencia al respetable y se emociona. Realiza un corazón con sus dedos anunciando y prometiendo, que la noche será inolvidable. Y vaya si lo fue.
Durante “Chantaje” el público levanta los brazos a la señal de cantante colombiano demostrando una conexión increíble entre los presentes y el frontman. Cambios continuos de ropa, con una sonrisa permanente en su rostro y según la pieza, exhibiendo su torso al descubierto. Entrega plena de Maluma. La banda que acompaña al compositor suena pulcra y acompasada. Hace los silencios precisos y necesarios para que el público también muestre el poderío de sus voces.
“Felices los 4” transformó en un volcán en erupción al Movistar y también la interpretó en una interesante versión de salsa. Con los primeros acordes de “V” se volvió a mostrar visiblemente emocionado y después de unos instantes para recuperar el tipo y coger aire, agradece por el cariño y el apoyo incondicional a sus fans. Con “Parce” volvió el baile a la pista y durante “Madrid” continuó el magnífico karaoke al unísono.
Ver bailar a miles de personas a la vez y acompañar a su profeta musical con su cuerpo y espíritu, es toda una experiencia y creo, que hasta los cimientos del palacio de deportes movían su esqueleto al ritmo de las canciones
Las bailarinas que acompañan al cantante, entran y salen según la canción y también se cambian de vestuario varías veces durante el atrapante directo. Verdaderamente, ver bailar a miles de personas a la vez y acompañar a su profeta musical con su cuerpo y espíritu, es toda una experiencia y creo, que hasta los cimientos del palacio de deportes movían su esqueleto al ritmo de las canciones. Otro disparo de petardo y anunciaba que terminaba la primera parte. Coge el micrófono su corista y presenta a los grandes músicos que acompañan al colombiano en este exitoso tour europeo. Conforme son presentados, cada uno realiza un solo instrumental demostrando su virtuosismo.
Maluma se muestra en permanente estado de conexión emocional con sus fans y estos no cesan ni un instante en acompañar el músico. El cariño es reciproco entre las partes.
Justo en frente del stage principal, hay uno más pequeño ubicado a la espalda de la mesa de sonido. A continuación, son presentadas las bailarinas y un despliegue de seguridad preparaba todo para que Maluma emergiera nuevamente desde el sótano, pero en este caso del escenario secundario. Canta “Cosas pendientes”, “+57” y “Ohnana” durante la cual, en sus últimos compases desciende de las tablas, sé quita su camiseta regalándosela a un fan y emprende el camino de regreso al stage principal con una bandera de Colombia sobre los hombros que se la había obsequiado alguien del público y, al pasar por una de las barras laterales del recinto, otro seguidor le regala una cerveza y va dando sorbos a la misma conforme prosigue su recorrido y la banda se llama a silencio a la llegada del cantante volviendo el Movistar Arena completamente a oscuras.
“Oootra, ooootra, ooootra” grita el público que quería más. Maluma cumple los deseos y sube nuevamente al escenario, esta vez, con una camiseta de la selección española de fútbol, lo que desata un rugido atronador del respetable y sentándose en un taburete alto acompañado por su guitarrista, que también se sienta a su lado, interpretan una versión lacrimógena de su himno “Sobrio” en formato acústico y durante la misma, el cantante regala rosas a algunos fans, obteniendo atronadores vítores y aplausos, como a lo largo de toda la magnífica velada.
Antes de concluir, quiero agradecer a Juanjo Sánchez de INNERCIA Entertainment Spain, por su profesionalidad y colaboración en todo momento para nuestra labor y al gran Cesar Lorenzo Pérez de El Paparazzi Musical por su amistad, ayuda y trabajo. No se pierdan sus grandes capturas de este doctor de la lente en @elpaparazzimusical y en elpaparazzimusical.com
“Según quién”, canción que concluyó con una demostración del poderío de la gola y los pulmones del músico y la bailable “COCO LOCO”, son las últimas caricias sonoras que reconfortan el alma de los presentes, poniendo punto y final a la trilogía de conciertos del artista colombiano en el Movistar Arena y recibiendo una ovación titánica ante un diluvio de confetis, confirmando el amor mutuo y eterno entre las partes.
Maluma trajo a Madrid un show de primer nivel y logró cautivar al público hasta llevarlo al éxtasis pleno.
