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Fran Nieto |
Nos hallamos ante un libro que mezcla magistralmente la sabiduría ancestral con los más recientes descubrimientos neurocientíficos. Un ensayo que destaca sobremanera por su capacidad de hacer accesibles conceptos complejos sin trivializarlos jamás. Se explora en profundidad la relación que existe entre nuestro cerebro y las demás partes esenciales de nuestro organismo, como son el sistema respiratorio, el intestino y el corazón; demostrándonos como todos estos elementos están interrelacionados entre sí, y la innovación que ello supone ante las teorías cerebrocentristas dominantes hasta hace bien poco.
Nazaret Castellanos es la prueba de que, a pesar de la hiperespecialización, la ciencia puede permanecer abierta a la humanidad en su totalidad. Física de formación, se convirtió en neurocientífica trabajando en Alemania e Inglaterra, antes de regresar a Madrid, donde dirigió el proyecto de investigación Interacción Cerebro-Cuerpo en la Universidad Complutense. Además del libro que nos ocupa, también ha publicado el ensayo El espejo del cerebro. Neurociencia y meditación, destacando a su vez por su incansable labor de divulgación.
Este libro es una invitación apasionante a explorar la magia del cuerpo y de la vida y a descubrir cómo el autoconocimiento puede ser la clave para un crecimiento personal auténtico y duradero
La autora nos enseña deleitando (tarea que aunque pueda parecer sencilla por el diáfano resultado obtenido seguro que esconde horas y horas de arduo trabajo de investigación y posterior ajuste), mediante una escritura perfecta en su conjunción de rigurosidad en los datos expuestos, una escritura muy agradable y comprensible (quien haya escuchado alguna de sus conferencias o entrevistas podrá comprobar su afabilidad) y el afan didáctico que muestra a partir de constantes ejemplos que se imbrican a la perfeccción con la empírica con la que abre cada capítulo.
Lo cierto es que es un verdadero placer poder disfrutar a cuentagotas de la sabiduría de eruditos que supieron anticipar desde su clarividencia y arrojo en su pericia sobre cuestiones a la postre revolucionarias en los campos por los que se movieron. Cada sentencia que aparece apuntada se halla imbricada de manera perfecta entre las descripciones más teóricas y las detalladas explicaciones de las emocionantes investigaciones que se van llevando a cabo sobre las distintas partes del cuerpo que se tratan, y es gracias al afán didáctico digno de elogio de la autora que tantos unas como otras se convierten en amenas y apasionantes a ojos del agradecido lector.
Así, Nazareth Castellanos, desde su entusiasta faceta de antropóloga cultural pone a nuestra disposición una recopilación de interesantísimas citas de eruditos (científicos, pensadores, literatos...) que ya se refirieron a los temas tratados en cada episodio a lo largo de la historia. Francis Bacon; Jenófanes; Hegel; Hume; Kavafis; Ortega y Gasset; Shakespeare; María Zambrano; Hana Arendt; la magdalena de Proust; su idolatrado Ramón y Cajal, del que destaca su célebre frase: “todo hombre puede ser escultor de su propio cerebro....todos aportan su granito de arena en un crisol indispensable de referencias que tocan el alma de quien las lee.
Particularmente reseñables son las alusiones a textos de tres grandes de la historia de nuestra literatura: a Quevedo se le cita en la parte dedicada al intestino, con una divertida narrativa en la que se compara a uno de los textos del escatológico escritor con un ultimísimos estudio de una prestigiosa universidad en el que se pueden llegar a conocer aspectos de la personalidad de un individuo a partir de sus defecaciones en un baño inteligente. Para no perdérselo. También se menciona a Lope de Vega en el capítulo dirigido a hablarnos del corazón. Concretamente en su obra La Dorotea, donde recupera la imagen del sol sobre el que gira la Tierra para referirse al órgano esencial por antonomasia. Por último, utiliza de manera harto formativa el capítulo VIII de Don Quijote de la Mancha, aquel que se refiere a los molinos, para hablarnos sobre la subjetividad. Según nos dice Nazareth, “ni Don Quijote ni Sancho Panza mienten. Uno ve desaforados gigantes donde el otro ve simples molinos de viento. Ambos reciben en sus ojos la misma señal electromagnética, pero la experiencia interna es bien distinta. Apasionante.
Una lectura recomendada a cualquier persona interesada en comprender mejor su cerebro y embarcarse en un camino de superación personal consciente
La autora consigue, a partir de hermosas reflexiones sobre el texto, hacer accesible, y porqué no decirlo, hasta un punto poético un mundo que casi siempre se presenta como muy racional, como suele ocurrir con los universos técnico-científicos. Nos proporciona una excelente visión general de temas que podrían parecer complicados y fomenta de esa forma un estudio más profundo de los mismos, apelando a todo el que se acerque a sus páginas a expandir su conocimiento señalando otras disciplinas en las que también fueron fruto de estudio. Ella misma nos da la clave en un momento del libro sobre lo deslumbrante que le resulta que la ciencia se acerque a otras especialidades del ámbito cultural: “¡Fascinante que los estudios científicos lleguen al alrte y el arte a los laboratorios!”.
Otra faceta de la obra que pensamos que es importante destacar es que su lectura también es adecuada y útil tanto para quienes practican la meditación y quieren conocer los mecanismos neurocientíficos implicados como para aquellos que son nuevos en esta disciplina que invita a la reflexión y tienen curiosidad por saber cómo funciona. Técnico en terminología y descripción, pero con un toque sutil e incluso en algunos instantes socarrón que lo convierte en accesible para todos, con independencia de los conocimientos científicos que cada uno atesore. Además presenta claramente las principales evidencias científicas de las modificaciones cerebrales producidas por la meditación y los beneficios de estas modificaciones en la calidad de vida. Tan intenso como claro, conecta los mundos espiritual y científico desde una perspectiva novedosa y muy interesante.
A colación del párrafo anterior, vale la pena subrayar lo importante del apartado dedicado al análisis de las capacidades plásticas del cerebro. La autora nos ilustra sobre cómo la meditación puede influir positivamente en nuestra mente, ayudándonos a desarrollar una actitud más atenta y consciente. Su investigación muestra cómo el cerebro tiende a distraerse, a depender de los hábitos y a reaccionar emocionalmente. Pero, a través de la meditación, podemos aprender a seleccionar y controlar mejor nuestros pensamientos, promoviendo así una mayor estabilidad emocional y mental.
Nazaret Castellanos es la prueba de que, a pesar de la hiperespecialización, la ciencia puede permanecer abierta a la humanidad en su totalidad
Si ya de por sí leer Neourociencia del cuerpo resulta un ejercicio altamente recomendado en cada uno de sus excitantes capítulos, ojo al último de ellos, que es canela fina de la buena. Se titula El instrumento de la vida y en él la autora nos interpela para que nos planteemos nuestro propio acto de lectura. De manera tan perspicaz como demoledora nos va indicando aspectos de dicho proceso que deberían ser los correctos y en los que sin embargo no acabamos de dar con la tecla. Empezamos con la postura: “no se puede leer encorvado”. Pues comenzamos mal... “También estás leyendo con las tripas. Aquí es donde tu cerebro pasa factura sobre la cantidad de ejercicio que sueles hacer”. Seguimos mal... Y nos paramos aquí porque si nos ponemos a pensar si la respiración es la idónea acabaremos mal. Menos mal que cuando se refiere a la emoción ahí sí que vamos a coincidir. El libro nos ha encantado, y nunca viene mal que te recuerden que tu cuerpo es una máquina que necesita de cuidados contínuos. ¡Gracias Nazareth!
En definitiva, una invitación apasionante a explorar la magia del cuerpo y de la vida y a descubrir cómo el autoconocimiento puede ser la clave para un crecimiento personal auténtico y duradero. Una lectura recomendada a cualquier persona interesada en comprender mejor su cerebro y embarcarse en un camino de superación personal consciente.
