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Pablo D. Santonja | @datosantonja
En esta entrevista exclusiva, exploramos el proceso creativo y las influencias detrás de una autora que despunta con su nueva obra basada en mitos artúricos, destacando el empoderamiento femenino y la reinterpretación de personajes clásicos como Nimue y Merlín. Aquí compartimos sus reflexiones sobre su carrera, su obra y sus próximos proyectos.
Aldara Prado comenta que el proceso de gestación de su obra fue un desafío que abarcó alrededor de 7-8 años desde los primeros bocetos hasta la publicación. Sin embargo, la producción intensiva duró unos 3-4 años, tiempo en el que tuvo que compaginar el desarrollo del cómic con trabajos como ilustradora. Aldara reflexiona sobre el aprendizaje que implicó enfrentarse a un proyecto de esta magnitud, especialmente viniendo de una trayectoria previa enfocada en libros ilustrados y cómics cortos.
“Fue un proceso casi de reaprendizaje del medio”, explica, mencionando cómo se sumergió en los fundamentos del lenguaje secuencial del cómic y se inspiró en autores como Will Eisner y Scott McCloud.
El corazón de la obra gira en torno a Nimue, la Dama del Lago, un personaje generalmente relegado a un papel secundario en los mitos artúricos. La autora decidió centrar su historia en la versión de Nimue como alumna de Merlín, explorando su crecimiento y su visión crítica. Por otro lado, reinterpretó a Merlín como un manipulador calculador, contrastando con su representación más amable y paternal en adaptaciones populares como las de Disney.
“Me interesa cómo Nimue, al ser representada en los mitos como una ‘Lolita’ que usa sus malas artes para manipular, refleja la presión estructural sobre las mujeres que buscan poder o conocimiento”, menciona.
Aldara destaca que su obra busca derribar barreras en la representación de personajes femeninos en la fantasía, un género históricamente dominado por narrativas masculinas. Explica que su perspectiva como mujer influye directamente en su forma de narrar historias, destacando los desafíos estructurales que enfrentan las mujeres para obtener autonomía.
“El conocimiento es poder, y a través del conocimiento las mujeres pueden tomar sus propias decisiones. Pero siempre hay una barrera, y después otra, y otra, y así hasta el final”, reflexiona.
Además, su elección de excluir a Arturo del enfoque principal refuerza su intención de priorizar las voces femeninas, centrándose en los conflictos y el desarrollo de personajes como Nimue y Morgana.
La autora reconoce la influencia de obras clásicas de autores como Chrétien de Troyes, Thomas Malory y John Steinbeck, pero recalca que su reinterpretación busca actualizar estos mitos desde una perspectiva contemporánea. También menciona que se inspira en otras creadoras del cómic como Ana Miralles y Teresa Valero, quienes abrieron camino para nuevas generaciones de mujeres en el medio.
Aunque ha sido un proceso exigente, la autora ya tiene planes para su próximo proyecto. Esta vez, planea explorar una historia ambientada en el presente, con un enfoque reducido en el elenco de personajes y una narrativa centrada en las relaciones humanas y la conexión con la naturaleza.
“Quiero que el próximo proyecto sea con medios tradicionales como el acrílico, las acuarelas y el washi. Es algo que me apasiona y quiero que refleje la historia con mayor autenticidad".
Por el momento, planea combinar su carrera como tatuadora en Berlín con el desarrollo de esta nueva historia, dando el tiempo necesario para experimentar y crear sin las restricciones de fechas de entrega.
La obra de esta autora no solo revisita los mitos artúricos con una frescura inusual, sino que también establece un espacio para una conversación más amplia sobre el empoderamiento y la representación en la fantasía. Con esta reinterpretación de Nimue, busca inspirar a una nueva generación de autoras y lectoras.
“Espero que las chicas que vienen detrás de mí tengan espacio para contar historias desde su perspectiva. Si este libro puede contribuir a eso, sentiré que he cumplido mi objetivo".
