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Mónica Grau Seto | @monmislilith
Es innegable la fascinación que existe alrededor de crímenes realizados por asesinos en serie, estas novelas nunca pasan de moda, y actualmente existe gran cantidad de series, documentales y post sobre true crime. Siempre ha existido la necesidad de entender que pasa por la cabeza de un asesino/a en serie, alguien que no siente empatía ni ningún arrepentimiento por matar, pero ¿se nace o se hace?
Aquí os dejo varias novedades de finales 2024 inicio 2025 de novelas de ficción, con varios autores noveles, que sorprenden por su originalidad y por la facilidad en que atrapa al lector en las tramas que nos presentan.
VICTORIAN PSYCO de Virginia Feito.
EL FILATELISTA de Nicolas Feuz.
NO JUEGUES CON ELLAS de Johanna Copeland.
SOCIÓPATA.UNAS MEMORIAS de Patric Gagne
Pero antes de analizar cada libro hay que diferenciar conceptos y preguntarse
¿TODOS LOS ASESINOS EN SERIE SON PSICÓPATAS?
Aunque hay un porcentaje de psicópatas criminales que, si encajan en el perfil de asesino en serie, no todos lo son, hay factores como el entorno familiar y social, las experiencias vitales marcan al individuo, y también hay factores genéticos de impulsividad y agresividad. El término fue acuñado por R. Ressler, agente del FBI en los años setenta, refiriéndose al asesino de dos o más personas en un tiempo de lapso concreto, entre el que hay cierto “enfriamiento” hasta que ese asesino tiene la necesidad de volver a actuar. Hay AS que lo hacen por un interés, como puede ser un motivo económico como una herencia o sicarios que lo hacen por encargo
Para ello debemos diferenciar los conceptos de PSICOSIS, PSICOPATÍA y SOCIOPATÍA.
PSICOSIS
Trastorno mental grave que afecta y altera su realidad y realiza actos sin ser consciente, confundiendo entre el bien y el mal.
PSICOPATIA
Es un Trastorno de personalidad antisocial (TPA) no una enfermedad mental, son conscientes de sus actos, no tienen empatía y puede imitar el comportamiento de los demás y desenvolverse con apariencia de bastante normalidad en la sociedad. Hay un factor genético y el funcionamiento del cerebro es diferente desde el nacimiento. El constructo de PSICOPATÍA hace referencia a un conjunto de signos y síntomas psicopatológicos vinculados. Se estima que un 1% de la población general es psicópata
SOCIÓPATA
También entra en la definición de TPA, sin factor, y por ello su conducta esta más vinculada en unos rasgos construidos en infancia a través de acumulación de malas experiencias de apego y hechos traumáticos. No hay un factor biológico, el sociópata no nace, se hace por este entorno. Estos si son capaces de tener relaciones de apego con algunas personas, suelen ser más impulsivos, no planifican sus acciones y presentan estallidos de violencia. El sociópata tiene dificultades para canalizar sus emociones y controlar sus conductas, siendo menos funcional ante los ojos de la sociedad.
En muchas ocasiones se vincula con la marginalidad y pobreza en su infancia, con actos delincuentes ya desde la adolescencia, sus referentes familiares que no han prestado apoyo educativo ni apoyo emocional, estas carencias afectivas y falta de apego familiar terminan afectando en esos individuos.
Curiosamente existe un documental titulado Step Inside the circle (2020) en el que se estudia los efectos devastadores del trauma infantil en los individuos. Se realiza círculo de trauma en el patio de una cárcel masculina y de máxima seguridad, reúne a un grupo de presos y se van realizando una serie de preguntas, analizando el pasado de estos hombres que han cometido graves casos criminales: ¿Tus padres te pegaban de pequeño?, ¿Vivías en la pobreza? ¿Te sentías despreciado en tu hogar?... todos los hombres van adentrándose en el círculo y descubriendo que sus infancias estuvieron igual de quebradas. El resultado del estudio acerca de la población en las cárceles es claro, hay una preponderancia de casos de falta de apego, pobreza y maltrato que ha generado un grave trauma infantil, convirtiéndolos en delincuentes juveniles y adultos peligrosos.
Pero además existe el concepto de la TRIADA OSCURA de la personalidad que aúna los siguientes rasgos: Psicopatía, Narcisismos y Maquiavelismo. Se centran en ellos mismos, manipulan al demás buscando iración y no manifiestan empatía, unas joyitas que deberíamos tener bien lejos.
TIPOS DE PSICÓPATAS
No hay consenso en la clasificación por parte de psicólogos, sociólogos, neurólogos y otros expertos para definir diferentes que TIPOS DE PSICÓPATAS hay, pero algunas de las principales tipologías son:
FUNCIONAL
Puede ser capaz de entender las emociones de los otros, pero sin empatizar, por lo que las utiliza para manipular y conseguir sus objetivos, suelen aspirar al poder y el estatus. (Muchos suelen ocupar altos cargos en empresas o dueños de empresas tipo estafa piramidal)
Estos funcionales, integrados o también llamados afectivos suelen ser la mayoría de los casos, ocultan sus rasgos y no cometen delitos criminales. Son ambiciosos en sus objetivos y actúan con superioridad ante los demás, disfrutan con el sufrimiento de los otros y actúan perjudicando a otros, pero sin que sea visible, tampoco se disculpan.
PRIMARIOS
Presentan un cuadro completo de trastorno de personalidad, con las características de Hare y coinciden con el clásico perfil que vemos en filmes, películas y literatura. Ted Bundy es un ejemplo, o también algunos lideres sectarios.
Sus rasgos principales son: Ser poseedores de encanto superficial, atractivos o con mucha labia, muestran gran autoestima y egocentrismo, muchos son narcisistas. Engañan y manipulan al resto de personas para llegar a sus objetivos, son parásitos y no tienen empatía ni remordimiento. Tienen tanta confianza que actúan de forma impulsiva creyendo que no los atraparan.
Da igual el ambiente en que haya sido educado, con un entorno seguro y con amor, el factor biológico está presente y es consciente de lo que hace.
SECUNDARIOS
También existe un trastorno de personalidad, similar a los primarios, pero hay una tendencia a culpa, con un fuerte componente muy alto de impulsividad que entra en conflicto con la moralidad. Este desequilibrio genera angustia y también actos violentos al no poder controlar, conducta similar a la de los sociópatas. Muchas veces se vinculan con experiencias traumáticas en su pasado, abusos en infancia, acoso escolar y ese factor ambiental junto a su genética, puede ser decisivo y un desencadenante para el futuro.
DISOCIAL
Similares a los secundarios, pero estos en ningún momento intentan encajar con la sociedad, buscan vivir apartados y en entornos altamente delictivos. Presentan conductas agresivas y destructivas, transgrediendo las normas sociales.
En este perfil, y también en el secundario, encajaría Charles Manson, empezó a delinquir a los 12 años, con carisma y poder de manipulación consiguió sus seguidores, actuaba de forma parasitaria consiguiendo que los demás actuaran por él, consiguieran financiación y nunca ha mostrado arrepentimiento ni compasión.
PROPUESTAS LITERARIAS
Ahora a los lectores les toca descubrir estos títulos y clasificar en qué tipo de perfil de psicópata puede encajar cada personaje.

VICTORIAN PSYCHO
Autora: Virginia Feito.
Editorial: Lumen
Género: Ficción, Thriller, Suspenso.
Sinopsis
El señor y la señora Pounds han contratado a Winifred Notty para que cumpla el rol de la perfecta institutriz victoriana: dará clases a sus pupilos (francés y costura a Drusilla y álgebra e historia al pequeño Andrew) y les contará cuentos antes de dormir. Pero Ensor House y sus habitantes ocultan más perversiones y secretos que la perturbada señorita Notty, capaz de convertir un té con elegantes invitados y bebés en el salón en un acontecimiento macabro. ¿Qué ha pasado en su vida para que una fría mañana de Navidad todas las piezas del pasado y el presente encajen y un final opuesto al de un cuento de hadas nos estremezca como un regalo sangriento?
Estamos ante una historia de ficción, que nos sitúa en la época Victoriana (periodo histórico en el Reino Unido, entre 1837 hasta 1901 durante el reinado de Victoria I), coincidiendo en periodo con dos títulos muy recomendables y escritos por Caleb Carr, El Alienista y El Ángel de la Oscuridad, aunque estos asesinos ficticios de finales del siglo XIX actuaban en EEUU.
La protagonista y psicópata es una mujer, Winifred Notty trabaja de institutriz, bajo su aspecto regio se esconde una mentalidad asesina y planificadora. No ha tenido una infancia fácil, pero intenta imitar y ocultar su pasado, y su objetivo es infiltrarse en diferentes hogares y actuar como un cuco, atrapando en su trampa a todos los .
La novela se mueve entre lo macabro y gótico, pero con mucho sarcasmo y un peculiar sentido del humor, alternando descripciones y situaciones de la época con la mente de una asesina que planifica y se divierte con sus crímenes, sintiéndose segura en todo momento ya que su modus operandi le ha funcionado desde muy joven. Además, en su mente disfruta planeando y recordando también crímenes anteriores.
Como en cualquier novela de época nos encontramos ante una gran mansión como escenario, se trata de Ensor house situada en Grim Wolds, y es el hogar de familia Pounds que ha decidido contratar a la srta Notty, confiando en que será una buena institutriz para sus dos hijos, Andrew y Drusilla, que tienen los mismos aires de superioridad que sus progenitores, y a modo de juego disfrutan con las renuncias de las anteriores institutrices.
Estamos ante una mezcla explosiva entre una novela de época de Jane Eyre y Una vuelta de tuerca de Henry James, también nos puede recordar a Carmilla de Joseph Sheridan Le Fanu, y todo ello convirtien a Winifred Notty en una especie de precedente en el tiempo del psicópata y ejecutivo Patrick Bateman de American Psyco, de Bret Easton Ellis.
Feito ha creado un personaje muy Pulp y la historia poco a poco se va acercando al género slasher, donde cada miembro de la familia y también el personal que trabaja en la mansión, irán cayendo uno a uno, a la vez que realiza una crítica a la sociedad de la época, a las apariencias que esconden las clases altas y el trato a los criados y trabajadores domésticos.
Además, añade otra crítica a las absurdas teorías de la época que seguía la Frenología o doctrina del cerebro, que se basaba en la forma y tamaño del cráneo (craneometría) y aspectos faciales (fisionomía) para detectar a asesinos y criminales, también era profundamente clasista y racista, considerando a individuos como los nativos americanos como seres inferiores. Por ello, una mujer blanca que trabaja como institutriz puede permitirse cometer sus crímenes, con total tranquilidad, ya que no encaja en el perfil de la época que la vincularía con estos, a la vez, que siendo mujer y pertenecer a una clase social baja la vuelve aún más invisible ante los ojos de los demás, siendo una gran ventaja.
Además, la autora juega a la cuarta pared y se dirige al lector/a, sabiendo que somos simples espectadores y no podremos advertir a nadie, del mismo modo que Dexter hablaba de su oscuro pasajero, la institutriz habla de su propia oscuridad y detecta la de los demás. Además, es un depredador que en ningún momento tiene un cazador, y a diferencia de muchas novelas no vemos el juego de detective siguiendo las pistas de un asesino.
Siendo una novela divertida y sarcástica, que no se toma en serio a sí misma, pero que funciona perfectamente como entretenimiento puro y duro, siendo una lectura rápida y adictiva.
Con tan solo dos novelas Virginia Feito ha conseguido que triunfen más allá del territorio español, conquistando EEUU, y en Hollywood ya han comprado los derechos para llevar a la gran pantalla, su anterior libro La Señora March a cargo de Elisabeth Moss y Blumhouse, mientras que Victorian Psycho lo producirá A24 y lo protagonizará Margaret Qualley.
Y hablando de cine, es inevitable pensar en otros títulos como la sorprendente Saltburn o también Parásitos, como vemos a la institutriz entrando en ese hogar, y aunque no forma parte de la familia si forma parte de todo el entramado de personas que viven entre esas paredes, señores y criados, moviéndose con total libertad y entre las sombras mientras los demás duermen ignorantes del peligro que corren.

EL FILATELISTA
Autor: Nicolas Feuz.
Editorial: Alfaguara.
Género: Ficción, Thriller, Suspense, Policiaco.
Sinopsis
Al acercarse la Navidad, una ola de terror recorre Suiza. Un asesino organiza una macabra búsqueda del tesoro enviando por todo el país unos paquetes que gotean sangre. ¿Su firma? Sellos de piel humana. Los medios de comunicación apodan inmediatamente al artífice del horror «el Filatelista».
Ana Bartomeu, inspectora de la Policía Judicial de Ginebra, divorciada y con una grave depresión, es la encargada de solucionar el caso junto con un improvisado colega con problemas de alcoholismo. Al mismo tiempo, una pareja es torturada y asesinada en una cueva en algún punto desconocido de Suiza por un hombre que se hace llamar Sam. La investigación llevará a Ana desde los elegantes barrios de Ginebra hasta las calles de Onex, una pequeña localidad de los bosques del Jura envuelta desde hace veinte años en el misterio por unos terribles acontecimientos que nadie parece recordar.
Premiado en el Salón del Libro de París, con Joël Dicker como editor, todo un referente del thriller suizo y que nos presenta a Nicolas Feuz. Dicker se quedó con los derechos para su sello editorial Rosie&Wolf, por la gran iración hacia Feuz, el cual tiene conocimientos de sobras con el conocimiento de la ley gracias a su experiencia como fiscal de Neuchatel.
El autor construye una novela coral, con personajes creíbles e imperfectos, con sus traumas y errores con los que deben convivir, ofrece unas descripciones sangrientas no aptas para todos los públicos, y nos ofrece un giro inesperado. Jugando al pasado y al presente, conoceremos al asesino, sin saber su verdadera identidad actual, desde niño y en época actual, pero su verdadera identidad no nos será desvelada hasta el final y es cuando veremos como tanto el autor nos ha dado las claves y pistas desde el inicio y no lo hemos visto venir.
Un asesino en serie juega con la policía de Ginebra, está enviando restos de cadáveres por mensajería por toda Suiza y su marca personal son unos sellos perfectamente realizados en piel humana, por lo que lo llamaran “El Filatelista”. La historia alterna el presente con la infancia de Sam, el asesino, siguiendo la idea de asesinos con una infancia truncada. ¿Un psicópata nace o se hace?
Sam es criado por su abuela, tras la muerte de su madre y con un padre que prefiere centrarse en su trabajo de policía, además es víctima de burlas en la escuela por vivir humildemente en una granja, y en su soledad busca una afición que es coleccionar sellos, mientras se convierte en un adulto que no va a permitir que lo abandone nadie más.
Una trama con un juego de pistas, por parte del asesino, pero también del escritor con sus lectores. Además del clásico juego del gato y el ratón. Ana Bartomeu es una inspectora de la policía de la Brigada Criminal de Ginebra, una mujer solitaria a la que su propia familia repudia. Ella intentará detener al asesino sin saber aun quien o quienes son las víctimas, junto a ella Michel Sautter, un policía de carácter voluble pero inteligente, junto a otros personajes que inicialmente puede parecer que no están conectados,
Nos describe una Suiza noir a la que no estamos familiarizados, muy similar al noir nórdico por la corrupción por los oscuros secretos familiares y con una trama vinculada a la investigación policial.
Un libro que además de la trama principal ofrece una crítica a la corrupción policial, pero también disecciona la idea de la familia, mostrando tanto por el fracaso de la propia Ana con su exmarido y su hija, como también como la falta de presencia paterna y de un entorno familiar seguro que, junto a otros traumas en la infancia, pueden convertir a un niño, que colecciona sellos como hobbie para huir de su miserable vida, en un sádico asesino.

NO JUEGUES CON ELLAS
Autor: Johanna Copeland
Editorial: Grijalbo.
Género: Ficción, domestic noir, suspense.
Sinopsis
En esta primera novela, Johanna Copeland nos presenta un thriller adrenalínico que explora desde tres puntos de vista el impacto que tiene la violencia de los hombres tóxicos en las vidas de las mujeres.
2019. Stella Parker tiene la vida que siempre soñó: un esposo al que ama, dos hijos que crecen felices por los que ella renunció a una carrera de éxito como abogada y una hermosa casa en uno de los barrios más elegantes de Washington D.C. Pero tras un extraño encuentro nocturno con su vecina Gwen, la vida de Stella se verá sumida en el caos y el oscuro secreto de su pasado sobre el que ha construido su vida amenazará con salir a la luz.
1987. Julie Waits es una adolescente de 13 años cuyo máximo sueño es ser animadora, la puerta de entrada a una vida de adolescente normal, con amigas y fiestas de pijamas, una vía de escape de la vida con su madre viuda y los novios terribles con los que se lía y que acaban viviendo con ellas.
A medida que Stella reflexiona sobre lo que en realidad llevó a Gwen a su puerta esa noche, la respuesta se vuelve cada vez más aterradora y evidente.
Un sorprendente debut en este thriller doméstico sobre secretos familiares, mujeres maltratadas que siguen un mismo patrón con sus vínculos con hombres violentos y obsesiones que perduran varios años. Aunque también hay buenos hombres muy diferentes a los que abusan, y nuestra protagonista ha elegido perfectamente a su esposo, y con un elemento nuevo, una mujer maltratada que es una asesina en serie y atrapa a sus verdugos convirtiéndolos en víctimas. Ahora sólo falta descubrir quien es entre el abanico de mujeres que van apareciendo en la novela.
Curiosamente la idea surgió de una experiencia real en la vida de la autora, cuando una vecina apareció en su casa, con moratones y pidiendo ayuda, ya que su marido la maltrataba. En pocos días corría el rumor en el vecindario sobre el mal aspecto de la mujer y lo vinculaban al alcoholismo, sin ser conscientes de la terrible realidad que vivía entre las cuatro paredes de su hogar. Esta idea de abuso y misoginia llevo a Johanna Copeland a plantearse en dar un giro a la situación, ¿y si una víctima de maltratos en realidad fuera como una araña tejiendo una trampa y se convierte en verdugo?
La historia alterna diferentes tiempos y nos presenta a varias mujeres, en el pasado conocemos a Sharon, una viuda junto a sus dos hijas adolescentes, Julia y Paula, ambas soportan comportamientos agresivos del nuevo novio de la madre, pero lamentablemente no es el primer maltratador que convive con ellas, y con el tiempo las hermanas decidirán seguir caminos muy diferentes, y Paula será el personaje femenino que buscará alejarse del patrón familiar y Julia seguirá con cierta tradición familiar.
En el presente se nos presenta a Stella, casada con Tom, lleva una vida acomodada y es madre de dos hijos con buenas perspectivas de futuro. Pero su aparentemente perfecta y planificada vida puede quebrarse en cualquier momento cuando recibe la visita de una extraña vecina que se deja el móvil en casa, y a partir de allí recibe unos mensajes anónimos, parece que alguien de su pasado conoce su identidad y la vincula con algunas muertes.
Una historia que sigue con el clásico perfil de mujer asesina o viuda negra, estadísticamente hay menos asesinas femeninas y matan de forma diferentes que los hombres, estos crímenes suelen ser o bien pasionales o por motivos económicos. Y además uno de los principales métodos utilizados es a través del veneno. Ya que no hay un uso de fuerza física, ni una escena del crimen sangrienta y violenta, además en muchos casos apenas queda rastro o pruebas de la sustancia utilizada.
Uno de los nombres más conocidos con el envenenamiento fue la boticaria Giulia Tofana, en la Italia del siglo XVII, curiosamente ella vendía la llamada “acqua tofana” a otras mujeres para que pudieran enviudar y escapar sin sospecha de asesinato de matrimonios abusivos. En el pasado las mujeres al ocuparse únicamente de las tareas domésticas podían envenenar fácilmente alimentos o bebidas, planificando y con paciencia provocaban que enfermara se debilitara el cuerpo de sus víctimas, en 1851 se promulgaron controles médicos para registrar y controlar la venta de arsénico. Este mismo año Vanessa Montfort ha publicado la novela La Toffana, ganadora del Premio Primavera de Novela 2025, por si queréis conocer mejor a este personaje histórico.
Es una historia con varias mujeres y las opciones que eligen, por un lado, está muy presente el tema del maltrato, luego el de la asesina manipuladora que decide tomarse la justicia por su mano y la renuncia silenciosa que hacen muchas mujeres al llegar la maternidad, dejando de lado su carrera profesional. En parte tiene similitudes con el personaje principal de la Serie de Faye, de Camilla Läckberg, donde la protagonista también vive una vida de éxito y oculta un duro pasado familiar.
Una crítica a los abusos y maltratos, y a una sociedad que muchas veces mira para otro lado, vecinos o entorno que a pesar de ser conocedores de esta situación deciden no actuar, una asesina que eligiendo este tipo de hombres ve justificados los asesinatos que en realidad ocultan intereses económicos, y unas hijas desprotegidas que han aprendido a normalizar esta realidad.

SOCIÓPATA. UNAS MEMORIAS
Autora: Patric Gagne
Editorial Planeta.
Género: Autobiografía, Suspense, Psicología.
Sinopsis
Llevamos décadas intentando comprender a los sociópatas y su psique. Por primera vez, una de ellas se confiesa.
Desde muy pequeña, Patric se dio cuenta de que su presencia provocaba cierta incomodidad. Sospechaba que la causa era su incapacidad para sentir emociones tan primarias como el miedo o la culpa, y la empatía era un término que le resultaba ajeno. Así que empezó a hacerse pasar por una más. Pero la incomprensión del resto y su rechazo hacia las personas como ella acabó siendo insoportable. Con la intención de sentir lo mismo que sentía su entorno, se puso a robar, mentir e incluso apuñaló a una compañera de clase con un lápiz.
Ya de mayor, la autora se embarca en una misión para demostrar que los millones de personas que comparten su diagnóstico no son monstruos. A lo largo del camino, se enfrenta a la complejidad de las relaciones humanas: desde su psicoterapeuta ―superada por el perfil de su paciente― hasta un anónimo que elige mal a su víctima de chantaje y un padre que lucha por aceptar la condición de su hija. Un testimonio cautivador, honesto y sin precedentes que revela los mecanismos de una psique que ha inspirado la ficción durante siglos, y que nos invita a revisar nuestra percepción de los trastornos mentales y a aceptar a quienes los padecen.
Podríamos hablar de verdades, mentiras y sombras de Patric (Patricia) Gagne, la psicóloga que decidió investigar su propia sociopatía, ya desde muy joven su comportamiento errático preocupaba a la familia y era consciente de ser diferente al resto. Sin duda, su relato ha llegado a confundir a otros psicólogos que dudan de ese autodiagnóstico, y hasta Patric reconoce que le gusta mentir, por lo que juega con ello en el relato y se presenta así: “Me llamo Patric Gagne y soy sociópata”
Muchos especialistas creen que actualmente, y potenciado por las redes sociales, hay demasiada gente auto diagnosticándose como “tdah, tea, bipolar…” Jugando con el “no encajar” de la juventud, y banalizando a condiciones que si deben ser diagnosticadas por profesionales. Gagne busca acercar las enfermedades mentales y otros trastornos a los lectores a través de estas memorias, desmitificando conceptos erróneos vistos desde fuera y a menudo estigmatizados, además vincula la relación entre la sociopatía y la ansiedad.
Casada con su pareja desde la adolescencia y madre de sus hijos, manifiesta que tiene sentimientos básicos como tristeza o alegría, pero con muchas dificultades para empatizar con los demás, del mismo modo que sucede con el autismo, habla de un amplio espectro en la sociopatía y evidentemente ella tiene claro que nunca haría daño a nadie. también deja claro la importancia del entorno y familia en la que creció, seguramente si hubiese nacido en un barrio pobre y con una padre o madre violentos, su condición será mucho peor, y detalla que hay dos grupos de emociones, las Primarias o básica (ira, miedo, sorpresa, anticipación, aversión, alegría…) que si tienen los sociópatas y luego las Secundarias o sociales y estas no aparecen en los sociópatas y psicópatas.
Es un alegato directo, ¿con franqueza o tal vez cierto narcisismo?, pero altamente adictivo para saber que le pasa por la cabeza a la autora. Como ella misma se describe, hay una parte externa que es lo que los demás esperan o como creen conocerla: La buena madre, esposa, la vecina simpática, buena psicóloga, la que organiza eventos y fiestas…, ha aprendido, observado e imitado el comportamiento de los demás y lo reproduce para no desentonar, pero luego hay otra parte, la interna y la verdadera, la que manipula, que se aburre con las normas o que no aguanta a ciertas personas, y que para llenar un vacío que crece en su interior, de forma incontrolable, comete actos imprudentes como entrar en casas ajenas o robar coches para dar una vuelta, pero tiene clara una norma: No hacer daño a nadie.
Ya desde la infancia recuerda las pequeñas señales, no tenia los mismos intereses que otros niños, no podía controlar la necesidad de portarse mal, desde los pequeños robos que coleccionaba y el inexistente sentimiento de culpabilidad, le gustaba observar a los demás y los otros se sentían incómodos ante ella, era extraña.
Además, relata la literalidad en algunas acciones, como cuando su madre le dice que pida azúcar a sus vecinos, al no estar en la casa ella se cuela y lo roba, y a partir de allí entrar en los hogares de otros se convertirá en una costumbre. Esos impulsos a cometer pequeños actos transgresores calmaban su ansiedad durante un tiempo, siendo consciente que era diferente a los otros.
Un relato en primera persona, que nos puede recordar casi el formato de un diario personal, y recordando la película ¿Quién engaño a Roger Rabbit? Y la frase del personaje de femme fatale de Jessica Rabbit “Yo no soy la mala, es que me han dibujado así”, y ella se sentía así desde su infancia y la tachaban de mala.
también habla de amor, aunque tal vez ella lo sienta de forma diferente, con la suerte de encontrar a una persona rebelde como David, con quien pudo confesarse y mostrar en parte su naturaleza Un sentimiento difícil de explicar, pero si cumplía los requisitos más similares al enamoramiento, ya que con él no se sentía vacía, algo que le sucedía con el resto de las personas y debía rellenar ese vacío con malos actos. Y él iba aceptando sus actitudes, ayudándola a dominar ciertos momentos de explosión.
Pasamos de la infancia y semi adolescencia a la carrera de psicología, donde pudo seguir explorando conceptos para entender mejor su propio ser, entendiendo los trastornos antisociales y por fin pudo sentirse identificada con la sociopatía, que era una baja disposición para empatizar con los demás. Y un poco (como vimos en la serie de Dexter) empezó a observar los comportamientos sociales, como interactuaba la gente, sonrisas, tocar un brazo o hombro y a practicar para camuflar (del mismo modo que muchas personas autistas hacen el llamado “masking”, para disimular su estrés sensorial o estereotipias), al final resulta agotador. Como adulta debía aprender de inclusión social y cambió su forma de relacionarse, si en la escuela se escondía o apartaba del grupo ahora quería formar parte e integrarse y de este modo no desentonaba. Estudiando y analizando los gustos literarios, musicales de otras personas, imitar posturas o forma de hablar.
Desde entonces ha decidido que la normalización es una herramienta terapéutica, para que entendamos que conductas o condiciones que se veían como diferentes o erróneas se entienden que forman parte, y hay que dejar de estigmatizar e informarse, para aceptar a las personas que inicialmente no encajan con lo mayoritario.
En este caso una novela con toques autobiográficos y posiblemente varios de ficción, muy diferente a las tres anteriores propuestas, pero que ayuda a entender mejor el modo de funcionamiento de la mente de una persona con TPA (Trastorno de Personalidad Antisocial).
Ahora es el momento de jugar, interpretar que personaje de cada novela puede vincularse a las diferentes definiciones de TPA, y analizar el comportamiento de personas que conocemos, con las que nos cruzamos a diario o trabajamos.